Del lat. status; del it. allarme, y este del ant. all’arme ‘a las armas’.

1. m. Situación de inquietud, susto o sobresalto en que se encuentra alguien o algo causado por algún riesgo o mal que repentinamente amenace.
2. m. estado que se declara para otorgar poderes especiales al Estado e implica una limitación temporal de ciertos derechos cuando se produce una situación de graves consecuencias en la vida pública, como catástrofes, calamidades, epidemias, etc.

Unos días antes de que el gobierno decretara el estado de alarma y el confinamiento obligatorio de todos los ciudadanos en sus casas, mi mujer, mi hija y yo salimos de Madrid anticipándonos a aquella decisión. Nos fuimos a la casa que la familia de mi mujer tiene en el campo de Elche. Allí nos esperaban mis suegros, mis cuñados y mi sobrino. La casa es muy grande y tiene una parcela de unos diez mil metros cuadrados en la que crecen naranjos, limoneros y viñas. Sin lugar a dudas, si habíamos de estar encerrados, mejor era estar allí que en nuestro pequeño apartamento de la capital, sobre todo para nuestra hija.

Comencé a hacer fotografías de nuestro confinamiento pocos días después del decreto del estado de alarma. Empecé a hacerlo casi de manera visceral, sin mayor propósito que el de mantener la cabeza ocupada y conservar la cordura, intentando que el desasosiego y la angustia provocados por las noticias que escuchaba o leía no se apoderaran de mí. Pasaron las semanas primero, luego un mes, luego dos. He ido fotografiando cada día de esta nueva vida. Sigo haciéndolo. Veo a mi hija y mi sobrino jugar felices, ajenos a todo. Veo a los adultos con los que vivo alterados y preocupados. Poco a poco me he dado cuenta de que todas estas fotografías tienen algo en común. Siempre remiten a la inquietud y al miedo, a la soledad, a la falta de libertad y al anhelo de recuperarla. Espero, deseo con todas mis fuerzas que todo esto pase pronto. Temo, sin embargo, que ya nunca seamos los mismos y que los sentimientos y sensaciones que dejan ver estas fotografías nos han de acompañar durante mucho tiempo, acaso toda nuestra vida.